LA GRATITUD
La gratitud tiene un inmenso poder para alterar nuestra conciencia y reformar nuestro mundo al instante, la gratitud es un nutriente esencial, un tipo de aminoácido espiritual para el crecimiento humano.
Sentir gratitud a pesar de cualquier experiencia cotidiana, aligera las cargas y hace más llevadera toda circunstancia,aún la menos grata.. Al igual que un sistema inmunológico debilitado,nuestro yo, suele caer en las garras de enfermedades como, la ira, la depresión o la insatisfacción, que nos privan de vitalidad y alegría. Si en todas las ocasiones nos mostramos agradecidos, las negatividades pierden poder y de alguna manera la gratitud nos puede devolver el impulso ascendente que nos inmuniza.
Con el fin de expresar sinceramente gratitud, tenemos que dejar todo lo que estamos pensando y haciendo, y estar totalmente presentes,entrando en contacto profundo con nuestra corazón y el del otro. Desde ese lugar de sinceridad y conexión,
La gratitud auténtica lleva a la CURACIÓN.
La gratitud es una actitud de una mente movida e impregnada por el corazón y es una opción hacia los otros, hacia las cosas,las circunstancias y un reconocimiento de la esencia que compartimos, a tal punto en que podemos hasta convertirnos en el recipiente de esa gratitud.
Por supuesto esto es lo que pensamos o sentimos acerca de la gratitud, más a veces, fallamos por no manifestarla, fallamos al no poder expresar nuestro profundo reconocimiento de la santidad de la vida.
Sin manifestación, sin acción, nuestra visión se pierde en la teoría , privados de la conexión que la gratitud crea.
Por lo tanto, tenemos que ser practicantes , cada vez que nuestro corazón se expanda volquemos esa energía en una acción de gratitud.
Si empezamos a hacer esto, en conjunto, diariamente, si empezamos a manifestar nuestra gratitud por las bendiciones que disfrutamos, nos sorprenderemos de los cambios que sucederán, aún a nivel mundial.
Vamos a tomar el proyecto de transformar nuestro mundo mediante INCONTABLES ACTOS DE GRATITUD.